domingo, 12 de febrero de 2012

Cerca de tres millones de electores participaron en primarias venezolanas

Con la participación de cerca de tres millones de venezolanos, fue escogido ayer domingo el candidato que representará a la oposición venezolana en las elecciones generales del 7 de octubre de 2012, según lo anunció la encargada de elecciones primarias del tribunal de elecciones de ese país.

El Gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, pre-candidato de Primero Justicia, alcanzó 1 millón 806, 860 votos, para quedar en primer lugar con el 65 por ciento de los sufragios, seguido del Gobernador del estado Zulia, Pablo Pérez, quien sobrepasó los 800 mil votos, para un 30 por ciento, y la diputada María Corina Machado, que obtuvo 105 mil votos para un 5 por ciento.



Pablo Pérez, María Corina Machado, Diego Arria, y Pablo Medina, se unieron en tarima al candidato triunfador, en lo que se interpretó como un gesto de unidad con miras a las elecciones de octubre.

Radonski fue apoyado por Leopoldo López, un fuerte contendor del Presidente Hugo Chávez, pero quien fuera inhabilitado en Venezuela, a pesar de una sentencia favorable de la Corte Interamericana de Justicia. López no pudo vencer el estigma de político bloqueado por el oficialismo.

Pérez y Machado, se pusieron a disposición de Radonski, en interés de vencer al Presidente Chávez en Octubre.


En sectores de la prensa venezolana y de la oposición política, hay preocupación, ya que un oficial de alto rango, muy cercano al Presidente, dio a entender recientemente que la Fuerza Armada del país no aceptaría un triunfo que no sea de Chávez.

Altas y bajas de Obama y Romney


Mitt Romney/"mittromney.com"
El equipo de campana del Presidente Barack Obama, aparentemente ha orientado su estrategia electoral pensando en una potencial nominación del ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney como el candidato del Partido Republicano. Por esa razón, estrategas prominentes de la campaña demócrata, han mantenido un ataque coordinado en contra de Romney.
La situación de Romney, no obstante, ha sido notoriamente compleja; su estatus de líder en la preferencia de los electores republicanos, ha zigzagueado continuamente, primero con la ascendencia rapidísima del Gobernador de Texas Rick Perry, posteriormente sustituido en sus niveles de aceptación sucesivamente por Herman Cain, Newt Gingrich, y finalmente por Rick Santorum, quien lo avergonzó en las asambleas de Missouri y Nevada, y en las primarias de Colorado. 
Presidente Barack Obama
By Pete Souza
Desde entonces, Santorum se ha convertido en acreedor de un fluido creciente de donaciones de campaña, prensa y apoyo. Sin embargo, a pesar de que lo recibieron eufóricamente en el foro de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), celebrada el sábado en Washington, el ex senador por Pennsylvania perdió la encuesta en vivo que tradicionalmente tiene lugar, por 6 puntos porcentuales contra Mitt Romney.

Romney, también ganó la asamblea del estado de Maine, en New England, sumando dos importantes triunfos el mismo día, aunque ninguno más emblemático, simbólico, y psicológicamente influyente que su victoria en la encuesta de CPAC.

Santorum ahora está enfocado en contender seriamente en Michigan y Arizona, donde las encuestas parecen favorecer a Romney, con lo cual trata de repetir lo del martes (7 de febrero) pasado, algo que parece improbable, sobre todo en Michigan, y aun en Arizona, donde Romney tiene el respaldo incontestable del Senador John McCain.

Del lado demócrata, el Presidente Barack Obama enfrentó una semana difícil, debido a la oposición de la Iglesia católica a su mandato de que en hospitales e instituciones de salud religiosas se administre anticonceptivos a las pacientes; una medida que el Presidente trató de suavizar, decidiendo que sean las compañías de seguro quienes cubran los anticonceptivos; un cambio que no varía la perspectiva de los obispos católicos que han atacado continuamente a la Administración, acusándola de intromisión y posible violación de la primera enmienda constitucional que garantiza la libertad de religión.

El enfrentamiento, ha supuesto una distracción considerable para las aspiraciones de re-elección del Presidente Obama.